En el aula de pintura de la Ludoteca la Huerta, Raquel les enseñó a realizar retratos de un compañero, fijándonos en los rasgos más característicos de cada uno e intentando que el resultado fuera lo más real posible.
Lo que intentó en esta sesión, fue que los artistas mejorasen su agudeza visual y captaran detalles de una persona, para plasmarlos en la pintura. Y creo que lo consiguieron.
Un flequillo y unos ojos pequeñitos les recordaba a Joseph, una coleta y un babero azul y amarillo a Beatriz, unas gafas azules a Eloy, un babero rojo y una melena a la altura de los hombros a Ana y una melena larga a Luisa.
Y la profe también quedo inmortalizada en esta bonita pintura.
Y la profe también quedo inmortalizada en esta bonita pintura.
Al final cada artista posó con su retrato, para comprobar la similitud. Y judgar vosotros viendo estas fotos que hemos titulado autoretrato al encontrarse el artista dentro y fuera del lienzo.
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