La Boca de la Pescá

La Boca de la Pescá es una modesta cumbre de 1.518 metros de altitud en las estribaciones occidentales de Sierra Nevada, a caballo entre el parque Natural y Nacional, justo en el vértice en el confluyen los límites de los términos municipales de la Zubia, Gójar y Dílar. Se compone de dos cumbres gemelas que tienen pocos metros de diferencia en altura, cuya forma se asemeja a la boca abierta de un pez de donde toma el nombre. Sobre la más elevada se asienta una caseta de vigilancia de incendios forestales. En el cerro frontero una solitaria encina.

En esta ruta salimos de la Fuente del Hervidero en dirección al Canal de la Espartera o el sendero de Haza Larguilla. En la explanada, junto a la caseta informativa del Parque Nacional, arranca un sendero de accesibilidad universal de alrededor de un kilómetro que nos conduce hasta el impresionante mirador interpretativo de Los Alayos. Allí, Juan nos recuerda el nombre de los montes. Si es cierto que lo que no puede ser nombrado no existe, Juan está resucitando ante nuestra fascinada mirada multitud de paisajes.

Después de disfrutar de las vistas seguimos el sendero. Desde aquí hasta nuestro destino tendremos un agradable paseo con la vista puesta arriba en el extremo oriental de la Boca de la Pescá, con un tramo final de subida más pronunciado, tras bordear el conocido como Cerro de las Pipas, por los restos fósiles de Dentalium unos moluscos excavadores denominados 'colmillos de mar' o 'pipas'.

Al rebasar este cerro, los senderistas que no desean llegar hasta la cima, continúan la senda siguiendo el Canal de la Espartera; dejan el cortafuegos a la izquierda y prosiguen por la curva de nivel dibujada por el canal hasta la caseta desde donde parte el tubo de la Central Hidroeléctrica de Dilar.

El resto subimos hasta lo alto de la Boca de la Pescá. Al llegar a la cima tenemos unas increíbles vistas del Trevenque, el Corazón de la Sandía, los Alayos y Picacho  Alto. 

Bajamos por el cortafuegos para encontrarnos con el Canal de la Espartera; lo seguimos a la izquierda hasta llegar al punto donde el canal lanza sus aguas con potencial cinética hacia el Dilar. Y merced a la fuerza del agua, se hace la luz (perdón por estos requiebros, pero hoy es el día de la poesía).

Regresamos por la misma vereda, pero ahora nos dejamos caer por el arenal hasta encontrarnos con el Cortijo Parejo. Desde allí bajamos por una cómoda pista forestal con vistas a el Barranco Corvales y los pueblos de Dilar y Gojar. Al llegar a un cruce, giramos a la derecha para, a través de un bonito pinar, llegar hasta La Guitarra, ya en Cumbres Verdes.