Este graffiti que decora un banco de ladrillos puede esconder la metáfora del objetivo pretendido con la actividad "Conoce Granada" destinada a un grupo de amigos y amigas que, además de muchas otras historias, comparten una anomalía en el cromosoma 21.
La ciudad debe ser el respaldo de un banco en el que todos y todas podamos sentarnos, comer pipas, besarnos, reirnos, consolarnos, reunirnos, escondernos... exprimir o dejar pasar el tiempo.
Un banco simboliza el espacio público de la ciudad, un lugar de encuentro compartido donde dejamos la huella de nuestra historia urbana.
Conoce Granada solo pretende eso, una ciudad con bancos que hablen del pasado, del presente y del futuro de cualquier vecino o vecina con independencia de la silueta de sus cromosomas.
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