Un día casi primaveral perfecto para caminar siguiendo el trazado de la acequia Aynadamar, un camino con historias que nos remontan antes del siglo XI. Las flores de los almendros se sacuden los fríos y nos regalan su aroma intensificado por lo cálido de la mañana.
El recorrido comienza en Fuente Grande, en Alfacar, donde nace la Acequia Aynadamar (o de las lágrimas). Esta acequia fue mandada construir por el emir zirí Abd-Allah para conducir el agua desde Fuente Grande hasta la capital de Granada. En su recorrido, la acequia pasa por las villas de Viznar y el Fargue, llegando hasta el Aljibe del Paso en el Albaicín.
Caminamos desde Fuente Grande hasta Viznar desviándonos de vez en cuando de la carretera para aproximarnos a la acequia Aynadamar. Dejamos atrás el Barranco de Viznar y luego el de Juan Torres, donde la acequia toma un atrevido atajo; a continuación, prosigue entre bancales. Nosotros caminamos por el llamado Cordel de Fuente Grande. Pasamos por el enclave de la Colonia. Podemos ver las ruinas de “Los Pozos” donde hacían vigilia los presos que iban a ser fusilados al día siguiente por la barbarie de la Guerra Civil.
Al llegar a Viznar caminamos hasta la plaza de Noguera, donde hacemos una parada que ya es tradición. Mientras, nos asomamos al Palacio de Cuzco (residencia veraniega del arzobispo de Granada, siglo XVIII), nos fotografiamos con la Iglesia de Nuestra Señora del Pilar al fondo o dejamos sin tortas a las panaderías de la zona.
Por la calle de la Alhambra llegamos al camino del Molino del Pino. Bordeamos el Barranco del Toril. Nos encontramos con los restos de un antiguo molino que se servía de la acequia de Aynadamar, aprovechando el salto de agua formado por el desnivel del terreno; hablamos del Molino del Pino que da nombre al camino. Cruzamos el Barranco del Beiro e iniciamos el Camino Real de Viznar.
Paramos a tomar el refrigerio mañanero en un cortijo-molino al que hemos bautizado como del Laurel.
Al llegar al Fargue nos topamos con el Camino de la Barrera; lo seguimos hasta llegar a la Barriada de los Remedios junto a la Santa Barbara. Su Majestad el Rey Alfonso XIII inauguró la primera Fábrica Nacional de Pólvora y Explosivos en esta zona del Fargue donde ya existían unos antiguos molinos de pólvora y salitre del siglo XIII.
Tomamos un camino de tierra entre olivos que nos lleva a la carretera que une el Fargue con la Abadía del Sacromonte. Cuando comienzan los pinos, nos desviamos a la derecha por una bonita vereda que nos conducirá al Camino del Sacromonte por el Barranco de Valparaiso.
Nos encontramos con la estatua del "Chorrojuno", el principe de los gitanos o el rey del Bosque de la Alhambra como se autodenominaba este curioso personaje del siglo XIX. Aquí damos por finalizada la ruta.
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