martes, 12 de febrero de 2019
Un pirata-niño viejo y cuentista.
"Cuentos de papel y arena", una de las representaciones a las que le tenemos más cariño. Un cuento propio mezclado con otro del gran José Saramago. A quien buen árbol se arrima...
Primero dejarlo todo impecable, por delante y por detrás. Y luego, a piratear un rato y luego, a dibujar en la arena la poesía de Saramago. "La flor más grande del mundo", la historia sencilla de una personita que va más allá del limite permitido, de la interrogación cuyo punto es el planeta marte; y la gente se admira de que haya realizado algo más grande que su tamaño y que todos los tamaños.
Es importante darnos cuenta que, aunque esta metamorfosis no sea poco habitual, uno pone todo el alma al servicio de este pirata niño que busca el miedo al mar, que se esfuerza en ser marinero.
Un pirata niño que de viejo se dedica a contar cuentos...
¿Premonición?
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