miércoles, 8 de febrero de 2023

De Nivar a Cogollos Vega

La mañana es fría y el sol, filtrado por nubes bajas, calienta con cierta timidez. El ambiente es húmedo gracias a las lluvias de ayer. 

Esta vereda se adentra en la umbría de la Sierra de la Yedra, en el valle labrado por el Río Bermejo. El término umbría es fácilmente reconocible por la humedad que nos acompaña y la áspera sequedad de la solana frontera.

Iremos desde Nivar hasta las inmediaciones del Cortijo Carialfaquir y desde allí regresaremos a Cogollos Vega. Nívar se encuentra enclavada en el Parque Natural de Sierra de Huétor, en una zona de media montaña conocida como Sierra de la Yedra. Esta planta trepadora aprovecha la humedad para trepar árboles y tapizar rocas.

El paisaje y el entorno natural de este municipio se caracteriza por sus bosques de pinos, quejigos y encinas y sus numerosos nacimientos de agua.  El casco urbano de Nívar se levanta a 1.055 metros de altitud, sobre una colina con vistas panorámicas hacia el Peñón de la Mata.

Desde la parada de bus ascendemos por la calle Granada hasta pasar junto a la iglesia del Santo Cristo de la Salud.  Nos detenemos en un mirador hacia el Río de Nivar y el cerro donde se encontraba el castillo de la localidad. Pasamos junto a un gran mural del artista Badi que nos recuerda el nombre de la localidad. 

Subimos por la carretera que transcurre entre Nívar y Alfacar (GR3101) hasta que tomamos una vereda que sale frente a la Urbanización Residencial Alfaguara, tras dejar atrás la del Caracolar. Podremos divisar buenas vistas del pueblo de Cogollos Vega, del Tajo, del Cerro del Cuco y de su majestuoso Peñón de la Mata.

Caminamos entre pinos muy viejos, por una vereda umbría que invita a la reflexión y la nostalgia. A los lados del camino salvias, tomillos, espliegos y romeros. Y las aulagas empiezan a adornarse de amarillo. 

Después de atravesar varios barrancos y de rodear pinos caídos que parecen querer impedirnos el paso,  llegamos al punto más alto de la ruta. Estamos a unos 1.350 m de altitud en la zona de Los Torcales. 

El resto del recorrido es de descenso, más pronunciado en el primer kilómetro y muy suave en los restantes. Son abundantes los musgos que se afanan en abrigar las calizas. Y las yedras que se incrustan en la roca o abrazan a los pinos y encinas. Los quejigos están desnudos y de sus ramas cuelgan algunas agallas esféricas. 

Descansamos en un claro donde el sol nos calienta y las rocas nos ofrecen acomodo. 

Seguimos bajando y pasamos por unas laderas donde los pinos vencidos nos relatan una antiguo incendio. La vereda se acaba donde se juntan el Barranco de la Alfaguara con la Acequia de Fardes.

Estamos en los parajes próximos al Cortijo Carialfaquir, donde llegaríamos si tomásemos la pista hacia la derecha.  Pero marcharemos en sentido contrario, siguiendo la acequia del Fardes. El río Bermejo nos acompaña a la derecha escondido en el subsuelo. La pista forestal es muy cómoda de caminar.

En la margen izquierda del rió la pista y la acequia del Fardes; en la derecha un muro de calizas de formas caprichosas.

Llegamos hasta un cruce de caminos, tomando el de la derecha que nos conduciría a Cogollos Vega a unos 1.000 metros de altitud. Completamos así una ruta de unos 13 kilómetros y 580 metros de desnivel acumulado. 



No hay comentarios: